Amor al cine

Noviembre es el mes. Es el mes de los sagitarios, de los intelectuales, de los  honestos y de los simpáticos. Y no lo digo yo, claro. Lo afirma la astrología zodical, que no digo que lleve razón, pero si lo dice, por algo será. Y con el frío de noviembre, también llega el extraordinario Festival Internacional de Cine de Cartagena -FICC-. 

Cartel edición FICC47

Cuando era pequeño, recuerdo como, durante algunas semanas de otoño, las farolas de la ciudad se engalanaban con carteles de películas que distaban bastante de las carteleras de los cines, y no entendía muy bien qué eran. Sin embargo, luego fui descubriendo que con la llegada del FICC existía otro cine distinto a los mega éxitos de Hollywood y a las superproducciones de Marvel; eran películas que no veía en los anuncios de la televisión.

 

Y es que el FICC logra unir a personas muy distintas cautivadas por la magia de una misma pantalla. En él se respira amor a un arte, el amor al cine. Y eso es, sin duda, gracias a decenas de personas, dirigidas por Nacho y Esther, que son todo un ejemplo de sociedad civil que se esfuerzan por hacernos más felices, al menos por un rato, a todos, y que consiguen que Cartagena aparezca en el mapa del cine. 

Presentación edición FICC49

Como toda nuestra vida, este año el festival ha tenido que adaptarse, y tendremos una 49 edición no presencial, en casa, pero tan llena de buenas películas como siempre. Cartagena es esta semana la capital española del cine, disfrutémoslo. Ha llegado el FICC y la casualidad ha querido que llegue también mi cumpleaños. El festival y yo, como ya os habréis dado cuenta, somos buenos sagitarios.